miércoles, 4 de julio de 2012

El resultado depende de TI


Érase una vez en un pueblo, un anciano que se le conocía en todos lados por ser muy sabio, era tan sabio que las personas que tenían una pregunta sobre cualquier tema iban a buscarlo y siempre les daba la respuesta correcta a sus inquietudes.
Un día un hombre envidioso de la fama del sabio decidió jugarle una trampa para acabar con su reputación y hacerlo quedar en ridículo así que se le ocurrió coger un canario en su mano y meter la mano en una caja para que el sabio no pudiera ver. Le preguntaría al sabio si el canario que estaba en la caja estaba vivo o muerto, si el sabio respondía que estaba vivo el lo aplastaría y lo sacaría muerto, y si por el contrario respondía que estaba muerto lo sacaba vivo y de cualquier forma el sabio se equivocaría.
Muy emocionado le contó a algunos vecinos que al día siguiente al medio día iba a demostrar que el sabio no era tan sabio como todo el mundo creía y estas mismas personas se encargaron de correr la voz y enterar a todo el pueblo.
Al siguiente día una muchedumbre curiosa y chismosa estaba enfrente de la puerta de la casa del sabio, el hombre toco la puerta y abrió con la sonrisa que siempre lo caracterizaba, miro a todos los que estaban presentes a los ojos y dijo “hijo mío, ¿en que puedo ayudarte?” a lo que el hombre contesto “Señor, se dice que eres muy sabio y todo lo conoces, he venido a probar eso y sólo necesito que me respondas a una simple pregunta… ¿el canario que está en esta caja está vivo o muerto?”.
El anciano se quedo pensativo y respondió: “la vida de ese animal esta en tus manos hermano, si tu quieres que viva o si quieres que muera esa es tu decisión y responsabilidad”.
El hombre quedo asombrado al ver que no pudo engañar al viejo y se dio cuenta que ese anciano era el hombre más sabio del mundo.

Reflexión:
Tal como en el cuento, tu vida y tu futuro dependen solamente de ti, si quieres dejar vivir tus anhelos y deseos más profundos o si los dejas morir, solo depende de una persona: de ti mismo.
Si quieres algo en tu vida sólo dependerá de ti conseguirlo pero para conseguirlo tendrás que dedicarle tiempo, dedicación, esfuerzo, sudor, lágrimas, etc., para que aquello que se desea se haga realidad, sino seguirá siendo solamente un sueño.
La gente que dice que la vida “no vale la pena” están equivocados, porque lo que realmente están diciendo es que no tienen metas que valen la pena. Fíjate una meta por la que vale la pena luchar sin parar. Siempre ten una lista de metas por lograr, cuando completes una, sigue con otra”.  (Maxwell Maltz).
Montse Parejo
Psico-Oncóloga